Mayo 2019. En repetidas ocasiones se han dado a conocer la falta de empatibilidad y profesionalismo en el trabajo que se vive en los hospitales por parte del personal médico y de enfermeras que ahí laboran, normalmente ponen como excusa que no se brinda el servicio adecuado por falta de material y espacio ante la saturación de enfermos que presentan.
Pero detrás de todos esos pretextos, también existe la falta de compasión y respeto y ética de los empleados que se la pasan comiendo, haciendo convivios o simplemente durmiendo en horas de trabajo olvidándose de las necesidades de cada uno de los pacientes que se encuentran internados o en espera de un lugar para ser atendidos.
Un joven de Lima Perú denunció a un par de enfermeras que se encontraban tomando una “siesta” en su turno laboral, en un hospital de Piura. De acuerdo a la versión del joven su madre había sido atropellada horas antes cuando viajaba en su motocicleta, por lo que la habían clasificado como grave presentando severo dolor corporal e interno, sin duda alguna el trato de buscar al personal encargado llevándose la sorpresa que se encontraba una recostada sobre la mesa y la otra sobre una silla totalmente dormidas sin importarles lo que afuera sucedía.
Se espera que las autoridades pertinentes tomen cartas sobre el asunto, pues comenta que eran varios los pacientes que esperaban con ansia ser atendidos medicamente mientras estas empleadas tomaban un descanso.